La Organización Mundial de la Salud, define a la salud mental como “Un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida y puede trabajar de forma fructífera”. No obstante, en niños y adolescentes este concepto se podría adaptar según el desarrollo de las capacidades sociales y emocionales que le permiten experimentar, regular sus emociones, establecer relaciones próximas y seguras, y sobre todo aprender.
Los Psiquiatras son médicos que atienden a personas con problemas de salud mental, en el caso infantil, la psiquiatría se encarga de ver dificultades intelectuales, emocionales y del comportamiento hasta la adolescencia. Por lo que, el rol del psiquiatra Infanto Juvenil es prevenir la enfermedad mental, mejorando el estado de salud mental de los pacientes y dotándolo de habilidades y estrategias que permitan mejorar su calidad de vida, evaluar y analizar las situaciones que provocan un problema mental.
Es de suma importancia que el psiquiatra establezca una relación estrecha con el paciente y su familia, este debe de tener dotes de comunicación, tacto, paciencia, saber escuchar, ser amable, tener empatía, tolerancia, ser comprensivo y además de poseer habilidades para la solución de problemas.
En la actualidad, existe un aumento significativo de los trastornos del neurodesarrollo, en específico el trastorno del espectro autista, los cuales en estos momentos son mayormente detectables y poco atendidos desde un abordaje multidisciplinario, por eso es importante como padres acudir a centros o instituciones donde te brinden una atención desde diferentes áreas ya que ésta condición de vida resulta ser comórbida a trastorno afectivos, psicóticos y de la personalidad.
Asimismo, es importante señalar que los trastornos depresivos mayores, la ansiedad y el suicidio en adolescente ha aumentado de forma importante y significativa en los últimos años ha raíz del confinamiento por COVID 19, ubicándose éste último en el tercer lugar dentro de esta población. El niño y el adolescente se tiene que enfrentar diariamente con este mundo que según su percepción es hostil, amenazante y constituido por una sociedad inflexible, donde muchas veces no tienen un acompañamiento ni de sus padres. Por esto, la importancia de la atención psiquiátrica.
Hay que recordar que un niño con una infancia sana será un adulto sano, igualmente también se necesitan padres sanos para formar hijos sanos. La salud mental de la familia es trascendental. Porque de ella vendrá el futuro de la sociedad.
Por eso en INVEDIN, sede El Marqués contamos ahora con el servicio de psiquiatría infantil y juvenil.
Dra. Maria Angelica Solano – Médico Psiquiatra.
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